Para quiénes son las ciudades

Una chica de 16 años está a punto de parir en la vereda. Vive ahí, junto a la boletería de un teatro en refacción, con su novio y un hijo pequeño. El trabajo de parto empezó hace unas horas y la sirena de la ambulancia que finalmente llega para llevarla al hospital se mezcla con el bullicio del comienzo de la noche en el Centro porteño. es viernes y la avenida Corrientes está tan viva como en sus mejores tiempos; parejas y grupos llenan veredas, bares y restaurantes y hacen cola frente a las puertas de los teatros. La ciudad y su espacio público parecen de fiesta, y con los restos de esa fiesta intenta sobrevivir un creciente conjunto de personas sin techo que viven y duermen en las calles, en las bocas de subte y en las plazas.